¿Cómo alargar la vida de tus guantes de trabajo?

Invertir en guantes de protección para tus trabajadores es necesario para garantizar la seguridad de los mismos. Los guantes de trabajo pueden prevenir golpes, quemaduras, cortes y lesiones por abrasión. Utilizar los guantes correctos y seguir las indicaciones para su cuidado es sumamente importante para asegurar el buen funcionamiento de tus guantes. Hoy te presentamos nuestras recomendaciones para alargar la vida de tus guantes de trabajo y obtener la mayor protección.

Partiendo de criterios generales que luego habrá que complementar con las recomendaciones del fabricante para cada guante en específico, dividiremos nuestras recomendaciones en tres aspectos fundamentales del cuidado de los guantes de protección: Almacenamiento, utilización e inspección.

Almacenamiento

El primero de nuestros criterios es el almacenamiento, partiendo de la idea de que los guantes son una herramienta más para las actividades del trabajador, estos deben ser guardados con suma precaución para evitar un desgaste innecesario:

1.- Los guantes nuevos deben conservarse en su empaque origina y acomodarse horizontalmente en el sitio destinado a su almacenamiento, con el fin de evitar dobleces o maltrato.  

2.- El lugar de almacenaje debe estar fresco y seco, a una temperatura recomendada de 25 °C. Un buen sitio pueden ser los peldaños inferiores de anaqueles.

3.- Los guantes deben conservarse lejos de rayos solares, calderas, radiadores u otras fuentes de calor. Cuando haya necesidad de secar un guante, debe evitarse la radiación solar directa. Todo esto con el fin de prevenir deformaciones en los mismos.

4.- El almacenamiento debe estar libre de ozono. Este existe regularmente en lugares con operaciones de alta tensión.

 Utilización

Usar correctamente y según las recomendaciones del fabricante de nuestros guantes de trabajo, nos da la seguridad de obtener el mejor performance de estos y la protección específica para cada modelo, sin embargo, de manera general, proponemos dos recomendaciones.

1.- Los guantes siempre deben ser utilizados en la mano para la cual fueron construidos, cuidando de nunca girarlos al revés para cambiarlo de manos, pues esto provocará deformaciones y la posibilidad de anular las propiedades protectoras del material de los mismos.

2.- Se deberá considerar la clase de guante y los materiales específicos para no exponerlos a sustancias o elementos inadecuados. Usar tus guantes para condiciones fuera de las recomendadas no solo te pone en riesgo, también reduce la vida útil de tus guantes de trabajo.

Inspección

Antes e inmediatamente después de utilizar nuestros guantes de trabajo, es una buena práctica realizar una inspección general de los mismos, con el fin de detectar cualquier anormalidad.

1.- Cada vez que se concluya la utilización de los guantes, estos deberán ser inspeccionados visualmente en busca de rasgaduras, cortes o deterioro en general.

2.- Para detectar la presencia de orificios se puede enrollar el refuerzo de la base hacia arriba para acumular aire en su interior y presionarlo para detectar cualquier tipo de fuga en el área de dedos o palma.

3.- Nunca se deberán usar guantes que en su interior estén húmedos, sea por inmersión en químicos o cualquier otro agente. En presencia de humedad, estos deberán ser lavados y secados perfectamente según las recomendaciones del fabricante.

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